…conseguir aquello por lo que tanto había luchado. Después de mucho pensar, consideró que lo mejor sería intentar escapar de noche, mientras todos dormían. ¿El problema? Tenía que lograr abrir la puerta de su celda y después encontrar el camino hasta la salida y evitar que el monje que la guardaba le impidiera huir de allí. Era consciente de que no sería fácil, pero tenía la certeza de que todo saldría bien y de que recuperar la libertad sería cuestión de horas.
El dolor de cabeza había desaparecido y su mente estaba más lúcida que nunca para intentar resolver la situación, aunque eso si, por ella siempre deambulaba la misma idea: llegar a los jeroglíficos y ser la primera en descifrarlos, entonces, la gloria sería suya.
Tenía claro que recurriría a la violencia si era necesario para alcanzar su objetivo. La única manera de lograr la llave era quitársela a la persona que le llevaba algo de comer cada ocho horas…
Si quieres saber cómo continúa el relato, entra en el blog de Rosa y lo descubrirás.
El jeroglífico lleva a los jueveros de cabeza. Seguro que se hace con las llaves, penita me da, con una brecha en la cabeza y el consiguiente dolor que provoca…espero que el monje de la comida, sea vieje o escuálido.
ResponderEliminarMe ha encantado leerte.
Un abrazo desde la ventana.
Bueno, si le sale bien, tal vez, sólo tal vez consiga lo que quiere; pero me da en la nariz que no le saldrá bien la jugada.
ResponderEliminarUn abrazo
A estas alturas, me he puesto en la cabeza que Marta es esta pobre mujer que terminó encerrada! Pues la historia viene intrigante y me muero de curiosidad por saber si hay un tesoro, un mensaje oculto, qué fue de la carta, y lo más curioso: qué fue de Jenaro!!! jaja!
ResponderEliminarMuy buen aporte Cris, ahora a ver si esta mujer se salva y logra su cometido!
Un beso al vuelo:
Gaby*
Se nos va a poner agresiva y todo la prota, a ver si consigue la llave y a ver qué pasa, que estamos intrigadísim@s.
ResponderEliminarUn beso
Y eso que era una monja de clausura! jajajaaj...cómo hubiese resultado la trama si hubiésemos comenzado con una espía! jejeje
ResponderEliminarMuy divertido!
Sigo leyendo...
un abrazo
jaja...y jenaro? lo dejamos por ahí en un patio escondido...jejee... muy bien la historia! sigo leyendo. un beso!
ResponderEliminarSalió del letargo la chica, y se volvió a la realidad, nada de reflexiones metafísicas, si hace falta a mamporros saldrá de la celda que parece de castigo. Excelente tu aportación.
ResponderEliminarUyyy Cris, me encanta leer como se va moldeando una locura divertida según cada cual. ¿Y el pobre Jenaro? No puedo olvidarme de él ni de Marta. Veremos.
Presa esa joven sin nombre pero tramando una solución a su encierro, a ver en qué queda.
ResponderEliminarBesos
Esta chica nos ha salido violenta, o quizá el golpe en la cabeza la tiene un poco trastornada y ello le ayude a salir de su encierro, pero todo vale si al final encuentra lo que busca y descubrimos en que acaba esta historia que ha tomado un rumbo tan rocambolesco.
ResponderEliminarSigo camino
Un beso
Mar
¿Un convento?, ¿una carcel?, ¿Marta ó Sonsoles? ¿Y Jenaro con su carta y su nariz de payaso?. Cuantos misterios por descubrir, esto parece Cuarto Milenio y encima la chica sabe karate y está dispuesta a liarse a mamporros con todo monje que se le cruce en su camino. Al menos le dan de comer. La mafia rusa no lo haría.
ResponderEliminarProsigo la intriga.
Un abrazo
Una mujer valiente, capaz de enfrentarse a todos para llegar a ser la descubridora el misterio. Ni monjes, ni mafia rusa, ni nada la va a detener.
ResponderEliminarUn beso.
Pues eso veamos si lo consigue. Sigo leyendo. Un beso
ResponderEliminarLa tenían presa??? Que pasó con el mapa??? donde están Jenaro, Marta, Sonsoles, Andrés ... ??? La mafia rusa se volvió a Rusia seguramente. Que lío!
ResponderEliminarun saludo
Bien ya tiene claro lo que ha de hacer, le quita las llaves al ¿carcelero? y sale por pies, jajaja, pero que lio jajja
ResponderEliminarUn beso.
Si supieras que cuantos más comentarios leo, más risa me da, jaja. Me encanta esta sensación de perdida pero a la vez controlando cada situación como créeis conveniente. Una buena aportación, amiga mía. Jaja. Es que no paro de reirme con cada ocurrencia...
ResponderEliminarUn abrazo fuerte.
Decidida si que la veo. Sin embargo no sé si será capaz de burlar la vigilancia del monje carfcdero que al parecer la custodia. Me temo que va a tener que recurrir a la intermediación divina si quiere llegar hasta los jeroglíficos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Mal fin le veo al pobre tipo que lleva la comida jajaja Pero bueno si es la única forma de escapar, que así sea !!!
ResponderEliminarUn beso.
Los dos matones del principio, se habrán cansado de esperar. A estas alturas habrán abandonado el seguimiento de JEnaro y Marta.
ResponderEliminarEso sí, yo no abandono ni loca el relato: me quiero seguir divirtiendo!!!!
besos