lunes, 25 de marzo de 2013

Crónica oficial del IV Encuentro Juevero en Jaén



La espera mereció la pena. Nueve meses después del III Encuentro Juevero en Córdoba, que tan buen sabor de boca nos dejó a todos los participantes, ya había ganas de volver a reunirnos para disfrutar de unos días juntos. Esta vez la cita tuvo lugar en Jaén, una ciudad que la mayoría de blogueros visitaba por primera vez.
            El viernes comenzaron a llegar algunos de los asistentes al encuentro y con ellos se produjeron los primeros abrazos, sonrisas, confidencias, anécdotas… Ya en el Hotel Xauen, donde se alojaron la mayoría de jueveros, surgieron varias. Hubo quien salió a comprar una botella de agua con unas preciosas zapatillas de estar en casa de color rosa y también quien se había dejado en casa su preciada colonia y no había podido comprar otra tal y como le hubiera gustado. Esa noche cenamos en el Bar Restaurante Garben y continuamos la velada tomando unas copas en el Pub Akelarre, no sin antes llamar a una emocionada Rosa para felicitarla por su cumpleaños. Algunos siguieron la fiesta con unos mojitos cerca del hotel.
            El sábado, la Plaza de Santa María, presidida por la Catedral que esperemos sea pronto Patrimonio de la Humanidad, fue el punto de encuentro desde donde partió una enriquecedora visita guiada por el casco histórico de la capital. Tuvimos la oportunidad de recorrer los principales rincones del magestuoso edificio obra del arquitecto Andrés de Vandelvira, e incluso salimos todos juntos del armario, o mejor dicho, por el armario, tal y como puntualiza Juan Carlos en su crónica. También nos sentamos en el coro a descansar un rato mientras escuchábamos con atención las explicaciones del guía. Gracias a él nos remontamos a los orígenes de la ciudad y quienes no son de la zona pudieron conocer las diversas leyendas en torno al lagarto de la Magdalena y la importancia que el Santo Rostro y Nuestro Padre Jesús Nazareno, más conocido como El Abuelo, tienen para la capital. La visita incluyó el acceso a los Baños Árabes, que por cierto pillamos recién reformados. Un lugar en  el que antaño no solo se recibían baños y masajes, sino que también hacía las veces de “centro social” en el que se “cocían” temas diversos de la vida cotidiana de las gentes de la ciudad.



            Después de conocer mejor la historia de Jaén y los rincones más emblemáticos de su caso antiguo, tocaba descansar un poco y, de paso, llenar el estómago, aunque antes nos hicimos varias fotos de grupo para inmortalizar los momentos vividos. El restaurante escogido para el almuerzo fue Casa Herminia, donde nos tenían preparada una mesa enorme, bien decorada, en torno a la cual degustamos ricos platos e intercambiamos impresiones sobre la visita. La comida contó con varias pausas para leer los relatos escritos sobre el tema de la belleza, eje del encuentro. Se vivieron momentos muy emotivos, especialmente cuando se leyeron textos de compañeros que no pudieron asistir a la cita por una u otra razón pero que estuvieron presentes en la mente de todos. El toque de humor y alegría, después de que algunos soltaran unas cuantas lagrimas, lo puso José Miguel, que se metió a los jueveros (y hasta a ciertos niños presentes en el comedor) en el bolsillo con sus cantes y ocurrencias. Por cierto, que el protagonista de su texto era el chochín flamenco, no digo más, aunque para los mal pensados les diré que, por lo visto, se trata de un tipo de pájaro.
            Con el postre llegó la hora de los regalos. Aquello parecían los Reyes Magos, con obsequios por todas partes. Desde Jaén jabones caseros hechos con aceite de oliva y, como no, también unas cápsulas del preciado oro líquido de la tierra, en concreto de Jimena, mi pueblo (habrá que hacer patria). Hablando de patria, Vivi (Cass) nos dio unos llaveros con la bandera de Uruguay y hasta la mesa llegaron unos lindos pajaritos mandando besos al vuelo de parte de Gaby. Tampoco faltaron las anécdotas en el almuerzo, con una juevera a la que casi dejan abandonada en el baño en el que se había quedado encerrada, bueno, no creo que al final lo hubieran hecho, pero quién sabe…
            Tras la sobremesa cogimos los coches para desplazarnos hasta el Castillo de Santa Catalina, desde cuya cruz pudimos contemplar unas bellas vistas de la ciudad que nos encargamos de inmortalizar con nuestras cámaras de fotos. También aquí hubo momentos de risas con las diferentes poses de unos particulares modelos en torno a la cruz. Dimos un agradable paseo acompañados por el viento, que quería ser partícipe de la reunión, y tomamos café en el Parador. A estas alturas tocaba descansar para coger fuerzas de cara a la noche, que se presentaba la mar de movida.
Y así, después de un par de horas de tiempo libre que cada cual aprovechó cómo creyó conveniente, volvimos a reunirnos en el hotel para disfrutar del cóctel preparado por el grupo de catering La Toja. Dispusimos de una sala hasta las dos de la madrugada de la que supimos sacar el mejor partido gracias al karaoke que nos montó Fernando (Fabián). El que más y el que menos se animó a cantar las canciones que aparecían en la pantalla y a bailar al son de la música. No faltó la típica conga, presente en toda fiesta, y otras danzas de lo más sui géneris.  Tampoco nos privamos de nuestro Risto particular, que valoraba las actuaciones sin pasar ni una: que si la entonación, que si la letra, que si un gayo por aquí, que si otro por allá… La verdad es que debía llevar razón porque la lluvia, que hasta entonces nos había respetado, no tardó en aparecer para quedarse en la provincia durante varios días (y todavía colea…) De nuevo hubo regalos, unas bolsas de la Diputación con folletos de la provincia y una pequeña botella de aceite. Verónica, por su parte, nos obsequió con unas simpáticas caricaturas y Encarni leyó unas emotivas palabras de Monserrat. La fiesta iba llegando a su fin y con ella las despedidas, que siempre es lo que menos nos gusta a todos. Por cierto, que he comentado lo de las caricaturas de Verónica y debo hacer una mención especial a sus hijos, que tuvieron un comportamiento ejemplar e hicieron muy buenas migas con José Miguel, al que no dudaron en ayudar en sus desplazamientos por la capital.
El domingo fue el día de la vuelta a casa, aunque ciertos jueveros se resistían a abandonar Jaén y aprovecharon la mañana para visitar y conocer Úbeda. En el aparato de transportes hay que señalar el autobús particular que desplazó a Vivi hasta Valencia, todo enterito para ella, ¡se podrá quejar! Por supuesto, ni que decir tiene que fue un gran detalle de parte de la organización del evento. Por la noche ya, cada mochuelo a su olivo (que mejor dicho que éste para la ocasión) con el recuerdo de los momentos vividos y el pensamiento puesto ya en el quinto encuentro juevero. Próximo destino…

13 comentarios:

  1. Cristina, no sé si felicitarte o agradecerte primero!...si bien ya nos habíamos ido poniendo al tanto de los pormenores del encuentro gracias a las fotos y a los post alusivos al encuentro que otros compañeros fueron subiendo en su momento, en esta crónica, quienes no estuvimos el placer de estar allí junto a ustedes, podemos tener con mayor claridad la ilación de los acontecimientos, cosa que te agradezco especialmente.
    Espero alguna vez poder participar directamente de alguno de estas reuniones jueveras que ya están haciendo historia, mientras tanto, les agradezco a todos el detalle de compartirnos anécdotas y fotos.

    un beso enorme.

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  2. Estupenda tu esperada crónica, no te ha faltado detalle... Después de la resaca de esta semana pasada, volvemos al recuerdo de estos días tan estupendos. No me canso de repetir, magnífica organización por parte del equipo de Jienenses...

    Besos!!!

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  3. Cistina, una crónica magnífica. Me has hecho recordar momentos inolvidables, los que pasamos juntos.
    Un beso guapa

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  4. Una crónica espectacular, qué envidia! a ver si a la próxima podemos coincidir por fin!!!!

    Muchos besos :)

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  5. Fue un encuentro magnifico y repito lo que dije en el almuerzo: somos todos (los de antes, los de hoy, los de mañana, presentes y ausentes) un puzzle (abiertor y dinámico): cada uno ocupa un lugar insustituible en la imagen, cada uno aporta su toque de color y termina por conformar esta genial imagen que somos los jueveros.

    (p.d. mi autobus remise, fue un detalle espectacular -ojo, reclamen porque a mi me lo cobraron- el guarda nos tomó la última fotografía en la que estamos Chelo, José Ignacio y la suscripta, tuvo la deferencia de bajarse del bus de muy buena gana. Pude hablar de futbol con él, justo que comentaban de un jugador uruguay, el Chori Domínguez,(con tres hombres en casa como saber algo de futbol no?) y el café a medianoche en Villa no se cuanto, fue otro detalle especial: abrieron la cafetería para nosotros, guarda, dueño y quien comenta.)
    He disfrutado con el alma de este encuentro, tanto como de los anteriores y es mi sueño que los del Sur, lleguemos a ponernos de acuerdo también en un encuentro bloguero (desde aquí hago la propuesta). Quien nos diga que alguno de por aquí, se lance a la aventura de conocer aquellos lares, que por cierto tienen mucho que ofrecer)

    Gracias Cristina, gracias a todos Uds. los de Jaen, tierra con historia y belleza, habitada por gente tan noble con sus olivares.
    besos y abrazos

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  6. Cris ya colocaste la última piedra, contado así detalle a detalle quien no lo vivio lo vive ahora. Lo del autobús de Vivi fue genial, cuando llegamos y preguntamos quien viajaba más y dice el conductor a Vivi, usted y yo, nos entró la risa, Un enorme autobús solo para ella jajajaja. Genial!!!!
    En fin que yo ya me estoy preparando para el próximo ¿ennnn?
    ....Venga animense organizadores....
    Un beso.

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  7. Cris muy buena tu crónica, lo mejor son los comentarios a los eventos. Un beso.

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  8. Bravo, llegó la crónica del IV encuentro con una sonrisa. La he leído y disfrutado, paladeando los momentos que vivimos.
    Por decir, que Jose Miguel contó lo que no estaba escrito, porque lo que estaba escrito es lo que publicó en el chochín flamenco, pero cuanto más (y bueno) dijo.
    Muchos besos y muchas gracias, amiga cronista juevera.

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  9. Ay, de verdad, almaceno las fotos y las impresiones de cada uno de los asistentes al encuentro, ahora disfruto de todos los detalles escritos y descritos por ti y te doy, os doy las gracias por haberme guardado un lugar entre vosotros, porque no me esperaba esa felicitacion de cumpleaños y mucho menos que Mª Jose leyera mi relato....¡¡como para no emocionarse!! Da gusto de pertenecer a esta familia.
    Un abrazo

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  10. Que linda Crónica Cris, yo me sigo emocionando con cada palabra, y como dije en Fb, esto acorta las distancias. La verdad dan ganas, muchas de estar ahí, compartiendo. Se los ve tan contentos, felices. Y no es para menos, es verdaderamente un grupo acogedor.
    Gracias por esta crónica.
    Que yo por ahora la veo con la ñata pegada a la pantalla. :)

    Un abrazo.

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  11. Que crónica tan bonita y fiel a los hechos, Cristina. Me ha gustado todos los detalles que sucedieron en el encuetro. Y me alegro que tengamos una periodista en este grupo juevero y en el otro, claro.

    Un abrazo, guapa.

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  12. He llenado mis ojos de fotografías, he leído algunos comentarios y anécdotas, pero tu crónica ha sido muy explícita en detalles que deja ese sabor a amistad, encuentro cálido y divertido.
    Te felicito por la labor, y los felicito a todos por esa posibilidad de unión que brindan.
    Traté de estar del modo posible, gracias a mi vecina que prestó sus alas, porque mis pajaritos más quisieran volar por sí solos, pero no podían.
    Un gusto leerte, verlos, saberlos, desde esta distancia que deja de ser tal, gracias a este lazo de comunicación que nos mantiene cerca.
    Un beso inmenso:
    Gaby*

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  13. Hola Cristina.

    Tiene un sabor especial leer tu crónica después de transcurridos, ya, casi tres semanas de nuestro IV Encuentro Juevero. Como verás voy con retraso, pero no me da el tiempo para más. Ha sido un verdadero placer recordar y, de alguna forma, volver a vivir todos aquellos momentos que difrutamos juntos. No te perdiste detalle y lo has reflejado de una forma impecable. En eso de «informar y entretener» te mereces mátricula. Tus letras asi lo confirman.Tenemos una muy buena periodista en la familia juevera.

    Solo agregarte que Jaén me sorprendió. Era la única provincia que me faltaba conocer de Andalucia y ha sido una delicia visitarla. Las vistas desde el castillo donde nos cafeteamos son espectaculares y la ciudad, que acabamos de recorrer el domingo por la mañana, preciosa.

    Gracias a las «anfitrionas» por lo que aportasteis para hacernos pasar unas horas tan agradables.

    Un fuerte abrazo.

    Lupe

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